Las vueltas de un violín extremadamente santiaguino me recuerdan, solemiyara, que me entrampaba en disfrutar de cada vez, porque me preocupaba de pensar como seria nuestra próxima ultima vez .
No sabia que cada vez era la ultima.
Desde el fondo es donde me siento a mirar pasar el mundo. Desde el fondo es donde me parapeto, oteo y escondo. En todo caso comienzo desde atrás, en mi final, con la ilusión de encontrar la génesis o por lo menos donde se corto la hebra.
lunes, junio 15, 2009
martes, junio 09, 2009
Epigrama para la solapa de un pijama.
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